El mar ha devuelto este martes una mano a la playa de las dunas de Calahonda, que las investigaciones creen que puede ser Natalia, la última víctima de violencia de género en Andalucía.
Y es que, según Emergencias, sobre las 15:15 horas un vecino dio la alerta de que había encontrada una mano, que parecía humana en la arena. La Guardia Civil lleva en búsqueda en playas cercanas al lugar del asesinato seis días en busca de estos restos mortales.
El cuerpo apareció el domingo 8 de enero en la playa de Las Cañas, cuatro kilómetros al oeste del lugar del asesinato en la playa de Las Chapas.
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